jueves, marzo 5

..CarCAjAdAs..


Una tras otra aparecieron. Desde lo más profundo de la panza le nacieron, subieron rápido por su esófago y transformaron su cara hasta desfigurarla. A borbotones, las carcajadas la tomaron por asalto durante horas y la dejaron cansada, felizmente cansada.
Será que volvió al lugar donde nació con una veintena de años ya vividos. Será que el embrollo de esas voces, humo de cigarro, migas de galletita y yerba lavada le dan la paz que no logró encontrar en ningún otro sitio. Será el cosquilleo de las ganas que se despiertan sólo en esa habitación, y sólo con esas personas. Serán las ráfagas del aroma que tienen los tiempos de sueños cumplidos, de germinares de otros nuevos, de aprenderes, de crecimientos, de más pasos dados junto a aquellos que hacen que las ganas vuelvan a cosquillear. Será la reaparición de los cruces de miradas cómplices que demuestran que, estén en el lugar que estén, los ojos pueden encontrarse igual. Será la inminente llegada de aquellos que están al caer, o la certeza de que los que están lejos, están más cerca que nunca. Será que volvió a sentir que los abrazos son la mejor manera de irse del mundo, para volver al instante con el triple de fuerzas. O será que se levantó con ganas de reirse de las pelotudeces que a diario no le mueven un músculo. Si. Pudo haber sido eso. Y todo lo demás también (…).

2 comentarios:

Carla Irupé dijo...

Me das ganas de reír y llorar, hasta que me duela la panza.
De reír y carcajear. Carcajear.

Sos hermosa.


Te quiero un montón.

Anónimo dijo...

Guiño, guiño